DEVOCIONAL 14 de julio- - Liberación de Maldiciones --
georgius servus Dei.
"Hay una maldición que no puede ser cancelada." *
Obispo Robert McAlister.
Evangelio de Lucas,
capítulo 10, versos 17 al 20:
Los setenta y dos
volvieron con alegría y dijo a Jesús: - Hasta los demonios nos obedecían
cuando, por el poder del nombre del Señor, que acabábamos de pedir a la gente a
dejar!
Respondió Jesús: - De hecho, vi a Satanás caer del cielo
como un rayo.
¡Escucha! Me he dado autoridad a ustedes para pisotear
serpientes y escorpiones, y sin sufrir ningún daño, superar la fuerza del
enemigo.
Pero no seas feliz porque los malos espíritus les obedezcan,
sino porque el nombre de cada uno de ustedes está escrito en el cielo.
Nosotros somos los instrumentos del Divino Espíritu Santo,
el Espíritu que viene a petición de nuestro Salvador el Señor, nuestro Padre y
Creador Dios y nada más.
Somos los vasos escogidos para que Dios haga su trabajo para
la salvación de la humanidad en medio de esta oscuridad Mundial.
Si pisado "serpientes y escorpiones" no es por
ningún poder de la nuestra, humana, física, metal, sino el poder de Dios y que,
debido a nuestro nombre "está escrito en el cielo."
Importante que este hecho será bien grabado.
Es básico, es claro que cancelar cualquier maldición que hay
que tener fe en Jesús, la fe en sus términos la obra redentora.
Debemos admitir en voz alta y clara que Jesús es el Hijo de
Dios que murió en la Cruz del Calvario para salvarnos.
Debemos admitir en voz alta y clara que Jesús es el Hijo de
Dios que murió en la Cruz del Calvario para lograr i cargó con nuestros
dolores.
Debemos admitir en voz alta y clara que Jesús es el Hijo de
Dios que murió en la Cruz del Calvario por nuestros pecados.
Debemos admitir en voz alta y clara que Jesús es el Hijo de
Dios que murió en la Cruz del Calvario para deshacer la maldición.
Jesús resucitó de entre los muertos al tercer día.
¿Quién subió al cielo y está sentado a la diestra de Dios
Padre, no para interceder por nosotros.
¿Y quién ha de venir a juzgar a los vivos ya los muertos,
teniendo sus, a su pueblo, la Iglesia, para la gloria de Dios en las alturas,
donde los querubines y serafines están llorando día y noche: "Santo,
santo, santo, el Señor Dios Todopoderoso, que era, que es y que ha de venir.
"
Sólo entonces seremos libres de todas las maldiciones que
cayeron en nuestras vidas.
ALELUYA.
Sin fe en Cristo no hay cancelación del punto de maldición y
al final.
Que el pueblo de Dios dicen
Amén.
georgius servus Dei
São Paulo
Em Calle Piauí .
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