domingo, 17 de agosto de 2014

DEVOCIONAL 17 de agosto – Salmo 51 - Miserere mei, Dei - Autor: georgius servus Dei


DEVOCIONAL 17 de agosto – Salmo 51 - Miserere mei, Dei -de David, el director de coro. Escrito después de que el profeta Natán habló a David acerca de su pecado que había cometido con Betsabé. - Autor: georgius servus Dei

Nueva Versión Internacional (NVI) - https://www.biblegateway.com

Salmo 51

Ten compasión de mí, oh Dios, conforme a tu gran amor; conforme a tu inmensa bondad,    borra mis transgresiones.
Lávame de toda mi maldad   y límpiame de mi pecado.
Yo reconozco mis transgresiones;  siempre tengo presente mi pecado.
Contra ti he pecado, sólo contra ti,  y he hecho lo que es malo ante tus ojos;
por eso, tu sentencia es justa,  y tu juicio, irreprochable.
Yo sé que soy malo de nacimiento;  pecador me concibió mi madre.
Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo;  en lo secreto me has enseñado sabiduría.
Purifícame con hisopo, y quedaré limpio;   lávame, y quedaré más blanco que la nieve.
Anúnciame gozo y alegría; infunde gozo en estos huesos que has quebrantado.
Aparta tu rostro de mis pecados  y borra toda mi maldad.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,  y renueva la firmeza de mi espíritu.
No me alejes de tu presencia,   ni me quites tu santo Espíritu.
Devuélveme la alegría de tu salvación;  que un espíritu obediente me sostenga.
Así enseñaré a los transgresores tus  caminos,   y los pecadores se volverán a ti.
Dios mío, Dios de mi salvación,  líbrame de derramar sangre,     y mi lengua alabará tu justicia.
Abre, Señor, mis labios,     y mi boca proclamará tu alabanza.
Tú no te deleitas en los sacrifícios, ni te complacen los holocaustos; de lo contrario, te los ofrecería.
El sacrificio que te agrada es un espíritu quebrantado; tú, oh Dios, no desprecias     al corazón quebrantado y arrepentido.
En tu buena voluntad, haz que prospere Sión;   levanta los muros de Jerusalén.
Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, los holocaustos del todo quemados, y sobre tu altar se ofrecerán becerros.

Amén.

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,  y renueva la firmeza de mi espíritu.

Aleluya

 georgius servus Dei


 São Paulo, Brasil.

 En la Calle Piauí.

Nenhum comentário:

Postar um comentário